A través de esta iniciativa cada semana compartiremos una aplicación de la biotecnología en más de una decena de campos en los que aporta soluciones innovadoras y disruptivas.
En la actualidad, el impacto de la biotecnología en nuestro bienestar y calidad de vida, economías y sostenibilidad del planeta es indudable. Aunque pueda pensarse que nos encontramos ante una disciplina reciente en el tiempo, la biotecnología está presente en nuestras vidas desde hace décadas aportando soluciones e innovaciones disruptivas ante cada vez un mayor número de desafíos. El último ejemplo lo hemos vivido con la pandemia provocada por la Covid-19 y el desarrollo de las vacunas de ARNm, gracias a las que la humanidad ha podido ir recuperando paulatinamente la normalidad perdida con el coronavirus.
La fotografía que observamos de la biotecnología es la de una deep tech que está transformando el mundo a través de un creciente número de tecnologías con aplicaciones en multitud de ámbitos de los que, en la mayoría de las ocasiones, ni siquiera somos conscientes.
Tal es el punto de relevancia que la biotecnología ha alcanzado como uno de los ejes vertebrales de nuestras sociedades, que la Comisión Europea la ha incluido en el grupo de tecnologías profundas que considera “trascendentales” para el futuro de la Unión Europea y, lograr así, su autonomía estratégica. En este sentido y, con el objetivo de responder a las demandas emitidas desde Bruselas, desde la Asociación Española de Bioempresas (AseBio) han solicitado al Gobierno la creación de un Alto Comisionado para Tecnologías Estratégicas Profundas.
Más allá del papel vital que este instrumento puede desempeñar como catalizador de las necesidades del sector biotecnológico y cómo esta industria responde a los acuciantes desafíos que oteamos en el horizonte, es necesaria una labor de concienciación social sobre la pieza clave que representa la biotecnología en nuestras vidas.
Por ello, desde la Plataforma de Mercados Biotecnológicos comenzamos el 2024 poniendo en marcha la campaña “¿Sabías qué…?” A través de esta iniciativa cada semana compartiremos una aplicación de la biotecnología a diversos campos como la salud, la alimentación o la cosmética.
Hemos seleccionado un total de 11 ramas de la biotecnología clasificadas en distintos colores, como se muestra a continuación:
- Biotecnología roja (salud): prevención, diagnóstico y tratamiento de enfermedades.
- Biotecnología verde (agraria): mejora del rendimiento de cultivos fundamentalmente mediante la edición genética de las plantas.
- Biotecnología amarilla (industria alimentaria): utilización de organismos vivos o compuestos mejorados genéticamente para optimizar el proceso de producción de alimentos y/o mejorar sus propiedades nutricionales y organolépticas.
- Biotecnología marrón (sector animal): producción de alimentos, fármacos y vacunas para animales.
- Biotecnología azul (marina): encargada de la preservación de los ecosistemas acuáticos y de la obtención de nuevos productos a partir de recursos marinos y fluviales.
- Biotecnología blanca (industrial): diseño y gestión de procesos biotecnológicos industriales.
- Biotecnología gris (medioambiente): recoge las aplicaciones de la biotecnología centradas en la protección del medioambiente.
- Biotecnología negra (armas biológicas): desarrollo de productos que contrarresten el impacto de las armas biológicas.
- Biotecnología dorada (informática): uso de recursos informáticos para secuenciación de genomas, diseño de fármacos o simulación de procesos biológicos entre otros.
- Biotecnología morada (aspectos legales y bioéticos): aspectos legales y bioéticos que conlleva la investigación biotecnológica y sus aplicaciones.
- Biotecnología naranja (comunicación): divulgación y comunicación científica.
Con la campaña queremos que se reconozca el papel crucial que la biotecnología tiene hasta en los aspectos más cotidianos de nuestras vidas. La concienciación social sobre esta presencia relevante, además de satisfacer las mentes más curiosas, contribuirá a destacar la biotecnología como el actor clave que es y, entre todos, impulsarlo y que despliegue todo su potencial tal y como se está demandando desde Europa.
